Las coronas de implantes permanentes son la mejor opción en caso de pérdida de dientes o daños irreparables. Los dientes cuentan con una raíz insertada en el hueso maxilar y una corona que es la parte blanca de la dentadura. Los implantes imitan esta estructura con tornillos que sirven de raíz y soportan una corona artificial o una prótesis con varios dientes.
En ese sentido, una corona sobre un implante permanente reemplaza un diente roto o infectado. Este procedimiento es necesario cuando la raíz del diente fue comprometida y la sanación es imposible. Por otro lado, los odontólogos instalan una corona sin implante cuando la raíz y el diente necesitan cobertura, pero el daño no implica a la raíz.
Este caso es frecuente para los dientes enfermos que necesitan cauterización y el daño compromete la mordida. Las coronas sin implantes recubren el diente dañado y facilitan la mordida del paciente. Las coronas sobre implante permanente, en contraste, reemplazan la pieza en su totalidad con un tornillo de zirconio o titanio y una prótesis en porcelana o cerámica.
Beneficios de las coronas de implantes permanentes
Restauración de la función masticatoria: Las coronas de implantes permanentes permiten a los pacientes recuperar la función masticatoria completa, lo que les permite comer y hablar con comodidad y confianza. Estas coronas son tan fuertes y estables como los dientes naturales, lo que facilita la masticación de alimentos variados y la pronunciación adecuada de palabras.
Durabilidad a largo plazo: Las coronas de implantes permanentes están diseñadas para durar muchos años, incluso toda la vida, si se cuidan adecuadamente. Esto ofrece una solución duradera para los pacientes que desean una opción de restauración dental de larga duración.
Aspecto natural: Las coronas de implantes están hechas de materiales de alta calidad que imitan la apariencia de los dientes naturales. Esto asegura que el resultado final sea estético y que la sonrisa del paciente luzca natural y atractiva.
Estabilidad y comodidad: A diferencia de las prótesis removibles, las coronas de implantes permanentes se fusionan de manera segura con el hueso de la mandíbula. Esto proporciona una estabilidad excepcional, eliminando la necesidad de preocuparse por que se deslicen o se caigan durante el uso diario. Además, no causan molestias ni irritación en las encías como pueden hacerlo las dentaduras postizas.
Conservación de la salud bucal: A diferencia de los puentes dentales, las coronas de implantes no requieren la reducción de los dientes adyacentes para su colocación. Esto ayuda a preservar la estructura dental circundante y promueve la salud oral a largo plazo.
Mejora de la autoestima: Restaurar una sonrisa completa y funcional con coronas de implantes permanentes puede tener un impacto significativo en la autoestima y la confianza de los pacientes. Les permite sentirse seguros y orgullosos de su apariencia, lo que puede tener efectos positivos en su calidad de vida en general.
Facilidad de cuidado: Mantener coronas de implantes permanentes es muy similar al cuidado de los dientes naturales. Los pacientes simplemente deben seguir una rutina de cepillado y uso de hilo dental, además de visitar regularmente al odontólogo para chequeos y limpiezas profesionales.
Durabilidad y longevidad de las coronas de implantes permanentes
Los implantes permanentes, específicamente los tornillos que se introducen en el hueso maxilar, están hechos con titanio. Este material es biocompatible y suele integrarse con el hueso. Esta técnica se diseñó con el fin de permanecer toda la vida en la boca del paciente. Con una buena instalación y cuidados oportunos, el implante tiene una alta durabilidad.
La esperanza de vida de los implantes permanentes oscila entre 20 y 25 años. Sin embargo, con un buen cuidado la durabilidad puede ser mucho mayor. El principal problema que puede reducir el tiempo de vida del implante dental es la higiene. La presencia de bacterias puede inflamar las encías y el tejido alrededor de la corona.
Con el paso del tiempo esta inflamación puede producir desgaste en el hueso, lo que concluirá con el desprendimiento del tornillo del maxilar. Por ello, la higiene oral es clave para aumentar la longevidad del procedimiento. Además, las coronas de porcelana o cerámica también pueden fracturarse al morder objetos muy rígidos o por mala limpieza y acumulación de bacterias.
El procedimiento de implante de corona
Para acceder al procedimiento de implante primero es necesario realizar una consulta con un especialista. De acuerdo a las necesidades de tu caso, el especialista recomendará injertar un implante o trabajar con las raíces saludables en tu boca. En caso de decidir utilizar implantes permanentes, se procede con lo siguiente:
· El especialista definirá si el tejido óseo y bucal están sanos para colocar el implante. Según sus conclusiones, se establece el proceso específico para el implante. En algunos casos, es necesario un injerto óseo.
· En un procedimiento de treinta minutos, se coloca la pieza de titanio que servirá de raíz de la corona. Puede ser necesario utilizar anestesia y saturar la herida con puntos quirúrgicos.
· Sobre el implante se coloca una pieza metálica provisional que evita el crecimiento de la encía y la entrada de cuerpos extraños en la herida. El paciente puede ir a casa en el proceso de osteointegración (adaptación del implante con el tejido óseo).
· Antes del procedimiento o después, se toman radiografías para producir la corona deseada. Luego de tomar las medidas, se procede a la producción de la corona en cerámica o porcelana en el laboratorio.
· En una segunda sesión, en una semana o dos, tiempo necesario para la cicatrización de la herida y la creación de la corona, se coloca la pieza definitiva.
Antes de colocar la corona en el implante, es necesario que la herida haya cicatrizado y que se pueda comprobar la adaptación de la pieza de titanio. El procedimiento suele ser seguro y menor. Aun así, hay casos en los que se presenta mayor riesgo: fumadores, daños en los vasos sanguíneos y dientes adyacentes o una infección del implante.
¿Por qué optar por las coronas implantosoportadas?
Las coronas implantosoportadas son una excelente opción para reemplazar dientes perdidos o con daño irreparable. Los implantes de titanio también se utilizan en reemplazos de cadera y fracturas de huesos. Esta experiencia demuestra la efectividad del material para adaptarse en el cuerpo humano.
Su principal ventaja es su practicidad y durabilidad. A nivel práctico, los pacientes podrán sonreír y comer como si tuvieran dientes naturales. Al estar enraizados en el maxilar y hechos con materiales probados, no muestran una diferencia significativa con los dientes originales.
Por otro lado, las coronas que cubren dientes dañados ayudan a solucionar el problema de dientes particulares. No obstante, su diseño y relación con el diente los hace menos duraderos. Las coronas cementadas se desgastan más rápidamente y necesitan ser reemplazadas con mayor frecuencia.
Consulta a tu especialista
No es mala idea buscar un especialista para evaluar tu caso. Las coronas implantosoportadas suelen mejorar la calidad de vida de los pacientes que han perdido dientes por accidentes o problemas de salud. Esto se debe a su durabilidad y la practicidad de la técnica. Sin embargo, solo un especialista podrá evaluar y aplicar las técnicas pertinentes.
Algunos pacientes necesitan una prótesis que reemplace un grupo de dientes, otros solo necesitan reemplazar un diente dañado. El diagnóstico depende de la evaluación del odontólogo del caso particular. Si te interesa recibir una cotización y una evaluación, no dudes en contactar con International X Dental Clinic.
Nuestra clínica está ubicada en Juárez, Chihuahua y cuenta con especialistas experimentados y equipos tecnológicos de última generación. Su ubicación en la frontera con los Estados Unidos facilita el acceso de servicios de salud oral para ciudadanos estadounidenses.
